La Redención Del Héroe Ficticio Inspirado Por El Auténtico

 En un momento de caos, desorden lingüístico resurge el hombre como un imán atrayendo sobre su imagen todos los calificativos afectivos, ensalzadores de sus cualidades.

1. No me sujeta el sujeto 
2. que Dios adulto es plural 
3. Ni tampoco me ata el verbo 
4. que Amor es atemporal 
5. y así mismo lo predico 
6. No hay correas, no hay maroma, 
7. no hay clavos, no hay puntas, 
8. no hay eslabones 
9. No hay leyes para la lengua viva 

Nació chico pero no se ha mantenido chico, primaveral como otros incluso de su misma edad. Su orgullo; por su amor propio, por esa su dignidad no se consiente hacer tal ridiculez ni que le tomen el pelo, ni dar pena e irónico como es dada su cultura general se burla compasivo de quienes lo hacen con una sonrisa picarona y mirada vivaz.
Hacer el payaso y sacar a relucir lo chistoso que es lo reserva para las reuniones de familia y amigos, amigos leales como es él.  Los guiños y pellizcos junto a otras intimidades los guarda para su pareja; una dama a juego con su forma de ser de noble caballero; caballero  sin mecánicos gestos aprendidos, esos modales con que se ocultan algunos villanos.
No sé cuando con exactitud dejó de estar verde, de ser un verde fruto; si fue o no al llegar la pubertad o posteriormente, es difícil saber en que momento atribuirle que es el hombre, que es realmente un espíritu adulto, hecho y derecho.
 Sencillo de apariencia él es un rey, es el rey de sus actos, señor de su comportar. Dueño como es de si mismo no le influyen las modas, tan solo le incentiva ser fiel a sus principios, valores morales que no ha traicionado. Él nunca se ha vendido; es un individuo, tiene verdadera personalidad, personalidad que le califica realmente persona e  impregna en su huellas,  rastro almizclero que perdurará en las memorias de quienes le han conocido y de aquellos por cuyos derechos y libertades ha luchado como perdura el aroma de una rosa natural arrebatada bárbaramente, sin necesidad alguna  al matorral.
Esa su constancia es la que le hacer ser a día de hoy su propio soberano. Fuera error de pintor retratar su nobleza con un corazón de tonalidad pastel como a los buenos chicos, como a los chicos que por buenistas no son beneficiosos como es él para la sociedad. Su corazón cívico, evolucionado y por serlo en lucha, rebelde contra toda injusticia es merecedor de un tono cobalto, de retratar magenta; color este a juego con su profundidad, esa profundidad con que enjuicia a los demás pasando de toda apariencia.  Y ese su ego también es digno de retratar con callo, está curtido Él es el hombre por antonomasia, es el hombre de verdad; el auténtico macho humano adulto alfa  y como tal piensa y como tal dice y como tal obra; es su manera de ser por serlo en verdad. Es veloz de reflejos para responder a cualquier imprevisto lo que indica que ha practicado mucho el reflexionar antes de actuar. Buena fórmula para adquirir rapidez el haber razonado con detenimiento previamente a obrar.   Sí, siempre a pensado con una cierta calma las consecuencias de su hacer, en las repercusiones de sus actos por lo que hoy se puede permitir dada la velocidad que con la practica ha alcanzado responder aceleradamente a cualquier imprevisto, actuar ante ellos de manera casi instintiva.