Aceptar vivir en incoherencia con mis sentimientos por las variadas excusas que hay, también habría sido dar mal ejemplo a mis hijos.
Muy poquito después, estaba ahí, aceptar esa hipócrita relación me habría supuesto un estatus considerable. Es una historia de herencias materiales.
Alguna acepta ese trueque; otras, como otros, no.
Decisiones, óptimas nunca.
También hay quienes por la comodidad no ejercen el derecho al adiós. De no ejercerlo nadie...derecho perdido para los siguientes
¿ O he de decir deber ? Con perdón ! El deber de no joder con quien no, pues si fácil es para los violadores abrirnos las piernas, también es fácil para nosotras abrirlas, aunque sea un mínimo de veces que las excusas se encuentran fácilmente !
Aunque nuestra libertad no sea plena ! Ellas ninguna pueden ejercer así que ni nos la dejemos arrebatar, ni la perdamos por no ejercerla !
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