Esas vidas caprichosas, ese glamour
reflejo de las de aquellos sub - normales
depende de nosotros. Depende de que lo permitamos, consintamos o no
No consentirlo es a favor de los dependientes debidos que son nuestros niños, ancianos y los que se dicen y llamamos dependientes.
¿ Acaso somos el soperano pueblo español sus papás y unos malos papás por ser sus consentidores,
consentidores de unos bitongos ?
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