Erase una vez que era
una plaga de cigarras
que queriendo las hormigas
que mutuamente se sirven
por ser hormigas fraternas
tan solo a ellas sirvieran,
o servir de esas obreras
coplas y coplas cantaban
pues unas cuentistas eran
Cantando y cantando coplas
administraban el silo en que ahorraban las obreras
para llegado su invierno,
para cuando ancianas fueran.
De tal forma administraban
el trigo de las obreras
que se volvieron voraces,
nada las satisfaciera
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