El que haya habido y haya quienes seamos malos para la religión, enemigos de la religión pues, como vemos en la realidad histórica pasada y presente, lo único que causa con sus interesados idearios son males a la humanidad no quiere decir que seamos malos para dicha humanidad, sino todo lo contrario
La astuta religión por ser malos para ella los librepensadores de dicha religión a inculcado que somos malos, luego que hay que tenernos miedo y por tenernos miedo hemos de ser tratados como seres terribles para la humanidad, una humanidad a la cual defendemos de ella haciendo cuanto podemos porque vea claro lo que la hace, como ambiciosa la manipula.
Si yo te tengo miedo a ti de mano ya desconfías y te proteges de mi. Si estás convencido de que soy malvada ya me atacas, agredes.
Y viceversa.
Con absoluta claridad nos es mostrando la historia pasada y actual quien es el villano. Hay que estar muy ciegos, cegados por la religión para no verlo.
Y quien lo sepa exponer, mostrar, enseñar con más claridad que lo haga.
El linde que separa el miedo del respeto es claro pues es el mismo que separa los instintos primarios del raciocinio.
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